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FONDOS SOSTENIBLES QUE PUEDES ENCONTRAR EN 2022

 

Si cuentas con unos ahorros y estás pensando en invertir, una buena opción para hacerlo son los fondos sostenibles. Una forma de rentabilizar tus ahorros, haciéndolo a través de gestoras que invierten su capital en compañías y proyectos que apuestan por la sostenibilidad. Por suerte, cada vez somos más conscientes de la necesidad de preservar el medio ambiente y son muchas las inversiones dirigidas a apoyar esta temática. Así que, esta puede ser una buena opción para canalizar tus ahorros si tus objetivos de inversión no se quedan únicamente en la rentabilidad. ¿Se te ocurre un modo mejor de obtener rendimientos de tu capital que hacerlo de esta manera? Hoy, te contamos dónde invertir en fondos sostenibles en 2022.

¿Qué son los fondos sostenibles?

En los últimos años, las inversiones sostenibles han crecido considerablemente y en este 2022 continúan siendo tendencia. Por eso, sigue aumentando el número de inversores particulares y empresas que escogen esta opción para incrementar su capital. Los fondos sostenibles constituyen una alternativa real para obtener beneficios a la vez que cuidamos el planeta. Pero, además, detrás de este tipo de inversiones subyace una verdadera transformación social. Supone un cambio en los criterios para elegir dónde depositar el capital, optando por invertir en empresas éticas y comprometidas con la sostenibilidad. De hecho, la ciudadanía demanda soluciones de sostenibilidad y las inversiones de temática sostenible son también más frecuentes.

Los fondos sostenibles son fondos de inversión colectiva donde a través de una entidad gestora se reúne el capital de diversos inversores. Esto permite realizar inversiones en todo tipo de activos y en cualquier mercado del mundo, que a título individual sería más complicado. Hasta ahí, su funcionamiento es similar a un fondo de inversión tradicional. La diferencia es que los fondos ASG (en inglés, ESG) es un modelo basado en criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo. De ahí sus siglas. Esto significa que el objetivo sigue siendo obtener beneficios, pero también generar un impacto positivo en la sociedad, apoyando a entidades éticas.

Tal y como decíamos anteriormente, con este modelo de inversión, además de generar rendimientos, se pretende mejorar la sociedad a nivel global. Los recursos del planeta son finitos y los estamos agotando, el cambio climático es una realidad y el agua escasea en numerosas regiones del mundo. Entonces, los fondos sostenibles invierten grandes capitales en entidades, proyectos y programas del ámbito de la sostenibilidad. Gracias a ello, de forma directa o indirecta se termina financiando temáticas como acceso universal al agua, gestión de residuos, transición energética, ecología, alimentación saludable…

Sostenibilidad y gestión ética

El concepto de sostenibilidad no hace referencia únicamente al cambio climático. Las compañías por las que se apuesta tienen que ser coherentes y a nivel estructural aplicar criterios éticos para su funcionamiento y empleados. Dicho lo cual, el inversor requiere también que estas entidades cuenten con políticas de igualdad de género y oportunidades, inclusión, contratos dignos, etc. Por eso, a este modelo también se le conoce como inversión socialmente responsable o fondos ISR. Los inversores concienciados demandan este tipo de situación favorable en aras de lograr una sociedad más justa. Ese objetivo de transformación social y de cuidado del planeta se traduce en un mayor número de inversiones en fondos sostenibles.

Resumiendo, para elegir el mejor fondo, deberemos asegurarnos de que su gestión está siendo sostenible y los objetivos fijados van en sintonía. Podemos fijarnos en que las entidades en las que se invierte, a nivel local, cuidan su entorno. A nivel más global, podremos observar si está reduciendo o no su huella ecológica, si emplea energías limpias, optimiza el agua, es energéticamente eficiente, etc. Pero no debemos obviar aspectos como la transparencia, la igualdad o la imparcialidad de las empresas.

Cómo identificar fondos sostenibles en 2022

Contar con unos ahorros para invertir y obtener unos beneficios, es un privilegio. Si, además, parte de nuestro capital contribuye a preservar la salud del planeta que habitamos, la inversión es redonda. Ahora, te desvelamos algunas pautas para identificar fondos sostenibles en 2022 en los que invertir parte de tu patrimonio.

- Asegúrate que cumpla la normativa SFDR. Hasta hace poco, un fondo podía decir que era sostenible, pero, ahondando un poco, apenas se diferenciaba de uno convencional. En marzo del pasado año entraba en vigor esta normativa que clasifica los fondos en tres grupos en base a su compromiso con la sostenibilidad. En el artículo 9, por ejemplo, se incluyen fondos que integran riesgos de sostenibilidad, aplican criterios ESG y sus inversiones tienen objetivos sociales o medioambientales.

- Realiza un estudio y compara. Además de la normativa SFDR, también puedes analizar tú mismo los fondos y ver cuáles son los que cumplen estos criterios. Son grandes compañías y no será muy complicado comprobar si están generando o no un impacto positivo medioambiental y social.

- Revisa los tratados de sostenibilidad. Otra forma de hacer una buena criba es tener en cuenta los tratados y acuerdos internaciones relativos al medioambiente. Haz una preselección de las entidades y sociedades que cumplan con estos acuerdos, normativas y tratados.

En definitiva, para identificar los fondos sostenibles en 2022, hay que tener en cuenta criterios ambientales, sociales y de gobernanza. Los primeros, relativos a las acciones que realizan las compañías en las que invierte el fondo en materia medioambiental. Los sociales, filosofía y política de empleo, ambiente y condiciones laborales, relación con empleados, clientes y proveedores, etc. Ejemplos de criterios de gobierno corporativo podrían ser la imparcialidad, la transparencia y la información periódica financiera de la compañía.