¿QUÉ SON LAS CONTINGENCIAS COMUNES?
El término “contingencias comunes” aparece en las nóminas de los trabajadores y suele despertar muchas dudas. Sin embargo, es un concepto que te interesa manejar y que, más allá de su aparente complejidad, es sencillo de entender. ¿Tienes curiosidad por saber más? En este artículo, exploraremos en detalle qué son las contingencias comunes, cómo funcionan y por qué son tan importantes en la vida de las personas. ¡Empezamos!
Contingencias comunes, ¿qué son?
Las contingencias comunes, en el contexto de la seguridad social, se refieren a los sucesos o situaciones imprevistas que pueden afectar negativamente en la vida de una persona y que, en consecuencia, pueden dar lugar a la necesidad de recibir coberturas o prestaciones. Estas contingencias son imprevistos que nos pueden ocurrir a cualquiera y que, por lo general, están fuera de nuestro control.
En este sentido, las contingencias comunes representan un tipo de descuento que se refleja en la nómina de los empleados y abarcan una serie de circunstancias que se encuentran respaldadas por prestaciones económicas, por parte de la Seguridad Social, en caso de que el trabajador tenga algún imprevisto de los protegidos por ley.
Mediante el pago de estas cuotas por contingencias comunes a la Seguridad Social, realizadas tanto por la empresa como por los empleados, se establece un escudo protector para el trabajador en situaciones de riesgo, como enfermedades, accidentes no laborales, jubilación, prestaciones por nacimiento de hijo/a, etc...
Tipos de contingencias comunes
Las contingencias comunes abarcan a las situaciones no relacionadas con el ámbito laboral que, a diferencia de las contingencias profesionales, se refieren a enfermedades comunes, escenarios o accidentes cotidianos ocurridos fuera del entorno y horario laboral. Dentro del ámbito de las contingencias comunes, destacan las siguientes prestaciones:
- Baja médica por enfermedad común: este beneficio se otorga cuando una persona se encuentra incapacitada para trabajar debido a una enfermedad que no está relacionada con su ocupación.
- Baja por accidente no laboral: esta prestación entra en juego en situaciones donde una persona sufre un accidente que no está vinculado a su empleo y se ve imposibilitada para desempeñar sus funciones.
- Baja por maternidad y paternidad: estas prestaciones dan apoyo a las madres y padres que necesitan ausentarse del trabajo debido a la llegada de un nuevo hijo.
- Riesgo durante el embarazo: en casos en los que una trabajadora embarazada se enfrenta a riesgos para su salud relacionados con su entorno laboral, esta prestación busca proteger su bienestar y el del bebé.
- Jubilación: aunque la jubilación puede considerarse una contingencia común, es importante señalar que esta prestación puede complementarse con un plan de pensiones para garantizar un retiro económico adecuado.
- Prestaciones por muerte y supervivencia: estas prestaciones se aplican en casos de fallecimiento, siempre y cuando la causa de la muerte no esté relacionada con un accidente o enfermedad laboral.
Papel de la cotización a la Seguridad Social en las contingencias comunes
El papel de la cotización a la Seguridad Social en las contingencias comunes es proporcionar un respaldo financiero a los trabajadores en situaciones como enfermedades, maternidad, paternidad, jubilación y fallecimiento, asegurando que no sufran pérdidas significativas de ingresos en momentos de crisis. Esta contribución también ayuda a la estabilidad económica de la sociedad al reducir la dependencia de los sistemas de asistencia pública.
¿Quién paga a la Seguridad Social por contingencias comunes?
En nuestro país, las cotizaciones a la Seguridad Social por contingencias comunes son compartidas entre los empleadores y los empleados. Estas contribuciones se calculan como un porcentaje del salario bruto del empleado y se deducen automáticamente de los salarios. Tanto empleadores como empleados realizan sus respectivas contribuciones, lo que financia el sistema de seguridad social y permite proporcionar prestaciones en casos de enfermedad, accidentes no laborales, maternidad, paternidad, jubilación y otras contingencias comunes. La forma en que se calculan las cotizaciones y la proporción exacta de la contribución varía según el salario y las circunstancias laborales de cada persona, así como las regulaciones vigentes en el momento.
En definitiva, las contingencias comunes son situaciones inesperadas que pueden afectar a cualquier persona en cualquier momento. La planificación adecuada y la gestión de riesgos son clave para hacer frente a estas contingencias de manera efectiva. Desde EVO Banco esperamos que este artículo haya resuelto las dudas que pudieras tener sobre qué son las contingencias comunes y para qué sirven. Si te interesa seguir aumentando tus conocimientos financieros, ¡no te pierdas nuestro espacio Al Día con EVO!
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