TWEETS DE DESTRUCCIÓN MASIVA
14/05/2019
Las 5 semanas que han pasado desde nuestro último comentario de “¿Qué pasa en el mundo?” empezaron siendo relativamente tranquilas en lo que a los mercados se refieren.
Como adelantábamos en la anterior entrega, a Theresa May le han concedido una prórroga hasta el 31 de octubre para que consiga ponerse de acuerdo con su parlamento. No parece que vaya a ser tarea fácil y nadie debería atreverse a presagiar lo que puede pasar aquí, esto se parece cada vez más a Juego de Tronos y a saber quién se sienta en el “Iron Throne” cuando todo termine.
Datos económicos
Por lo demás, los datos económicos, aunque regulares, siguen mejorando poco a poco y los mercados se han visto apoyados por la publicación de resultados del primer trimestre que está siendo mejor de lo esperado.
Tampoco los bancos centrales nos han aportado muchas novedades, no ha habido cambios en el mensaje, que sigue siendo eso mismo: “sin cambios”. Ya sabemos lo que se suele decir: “no news, good news”
No obstante, si alguno sigue los mercados de cerca estará pensando: “¡pero qué dicen estos, si habló la FED y no le gustó a los mercados!”. La verdad es que no le faltará razón, lo que pasa es que eso no quiere decir que el banco central americano cambiara el mensaje, sino que, como pasa en todos lados, a algunos les das la mano y te cogen el brazo y en este caso había gente que pensaba que la FED podía bajar tipos este año.
De todos los frentes que llevan abiertos muchos meses el más importante de todos es el que no ha avanzado favorablemente en los últimos días, Trump y China.
Hemos comentado durante todo el año que las conversaciones avanzaban positivamente y que estaban condenados a entenderse, pero debe ser que en las últimas semanas no avanzaban ya tan positivamente así que Trump ha tirado de su principal arma: Twitter.
A través de Twitter anunció Trump el domingo 5 de mayo que el viernes 10 de mayo impondría los aranceles del 25% que perdonó hace algunos meses.
“¡Es un farol!” pensó el mercado al principio, pero el caso es que, españolizando un dicho muy americano[1], Trump se había quedado en una esquina sin salida después de haber fregado todo alrededor y llegado el viernes no le quedó más remedio que cumplir su amenaza.
Winter is coming, que dirían algunos…
Pero todavía hay esperanza, el sentido común nos dice que tanto a China como a EEUU les interesa llegar a un acuerdo, pero quizás poner sentido común y Trump en la misma frase pueda ser arriesgado.
En definitiva, aunque el resultado más probable siga siendo un acuerdo, el mercado tiene que actualizar las probabilidades con la nueva información y por primera vez en algunos meses la nueva información es mala.
Como dijimos a principio de año: “pocas veces los mercados van en línea recta y va a ser difícil que no vuelva la volatilidad.” Aunque esto no tiene mucho mérito, la volatilidad siempre vuelve en algún momento.
[1] To paint oneself into a corner
¿AÚN NO ESTÁS SUSCRITO A INVERTIPS?
No te pierdas nada de nuestra newsletter sobre actualidad, lecciones y curiosidades de inversión. ¡No tienes que ser cliente de EVO!